Desde los albores de la humanidad el ser humano ha utilizado diferentes objetos como armas, en un principio eran maderas, piedras, rocas y cosas que encontraba en la naturaleza que las utilizaba como armas para su supervivencia, ya sea para cazar o defenderse de ataques. A medida que fue pasando el tiempo este ser humano fue evolucionando, interior como exteriormente.

Así nació la edad de hierro XIII siglos a.C., en Medio Oriente posteriormente llegaría a Europa. Con la expansión del imperio Romano, se difundiría por todo el mundo. Las primeras armas de este mineral llegarían a China recién en el siglo VI a.C. Las espadas y sables orientales tienen una tradición aparte, ya que esta fabricación de forjar una espada es una técnica muy antigua llamada “jaspeado o de varias capas”, la cual dataría del período de los Estados Guerreros en China (470 – 220 a.C.)
Posteriormente la combinación de diferentes minerales fue llevando a que las armas sean más duras y resistentes, por ende casi indestructibles. Su principal motivo de construcción fue el de preservar la vida, pero como todas las cosas tienen su ying y yang, su contrapartida es la de quitarla.-
Los Chinos dicen “una espada perfecta debe llenar los requisitos de: fuerza, dureza y flexibilidad”.
Las espadas tradicionalmente simbolizaban autoridad, poder y virilidad en el hombre.
La destreza y el manejo de estas, es tan antiguo como la historia de la construcción de las mismas, cabe destacar que en un principio los únicos que podían portar o manejar estas armas eran los llamados guerreros o de las castas de la nobleza, posteriormente estas se hicieron de uso común en todos los ámbitos de la sociedad.- En la actualidad existen más de 300 tipos diferentes de espadas y sables, tanto orientales como occidentales.-